Por José M. Enriquez
Si ustedes me siguen, probablemente sepan que creo firmemente en los beneficios que la fibra óptica hasta el hogar (FTTH) puede brindar a una comunidad y a sus ciudadanos; sin embargo, si bien ese es el objetivo final para todos, llevar internet de banda ancha a las comunidades rurales tiene sus propios desafíos, y cada comunidad también enfrenta sus peculiaridades (tanto en los países del primer mundo como en los países en vías de desarrollo). Encontrar nuevas soluciones que complementen la banda ancha por fibra es esencial para conectar a las personas en todos los rincones del mundo lo antes posible.
Recientemente tuve el privilegio de reunirme con dos personas increíbles que están encontrando formas innovadoras de ayudar a conectar a las comunidades rurales, al mismo tiempo que construyen alianzas globales para colaborar en la resolución de diversos problemas.
Deborah Simpier es cofundadora y directora ejecutiva (CEO) de Althea, una plataforma para proveedores de servicio de Internet (ISPs), basada en un modelo de blockchain que permite la coordinación/participación de múltiples entes involucrados en proveer el servicio.
“Althea desacopla las capas de servicio e infraestructura de la entrega de Internet y coordina el reparto de ingresos programático y transparente”. Según Deborah, la plataforma de Althea ayuda a construir redes de una manera más rápida y económica que nunca. Opera con soluciones de fibra e inalámbricas para llegar a los hogares de las comunidades rurales.
Althea ha implementado algunas redes no solo en los EE. UU., sino también en Colombia, Nigeria y Ghana, así como una asociación en Puerto Rico.
Conozca a Neil Mylet, un agricultor, humanitario e inventor, que disfruta haciendo del mundo un lugar mejor a través de la conectividad de banda ancha, pero también trabajando con personas de todo el mundo para encontrar soluciones a los problemas más apremiantes. Neil es el fundador del Rural Urban Center en Camden, Indiana, una comunidad de poco más de 600 personas, ¡así que es lo más rural posible!
“Estoy construyendo lo que se convertirá en el centro tecnológico y de empresas emergentes más grande de la América rural. Como parte de eso, usaremos la infraestructura que tenemos en el centro para llevar la banda ancha a la aldea, por lo que estamos montando en el techo y construyendo una torre de 100 pies para cerrar la brecha digital. Mi propósito en todo esto es ayudar a mi comunidad y al mismo tiempo construir un modelo que se pueda replicar sobre cómo implementar la banda ancha de una manera que aporte valor a la comunidad”, dijo Neil.
El objetivo de Neil es acercar a las comunidades rurales y urbanas. Sus esfuerzos no han pasado desapercibidos, recientemente fue reconocido por su alma mater, la Universidad de Purdue, en un artículo llamado “A Home Field Advantage“, en el que elogian sus esfuerzos no solo para conectar, sino también para empoderar a la comunidad local para que puedan aprovechar la economía digital.
Neil y Deborah se conectaron hace unos meses y rápidamente iniciaron un acuerdo de colaboración. El equipo de Althea ya está instalado en el Centro RuralUrbano.
Llevar la banda ancha de alta velocidad a todos los hogares del mundo es imprescindible; sin embargo, eso es solo el comienzo.
Tanto Deborah como Neil entienden que solo llevar conectividad a cada comunidad no es suficiente.
Althea tiene programas de divulgación con tribus nativas en los EE. UU., en los que se les presenta la fibra a través de un enfoque muy práctico. “Traemos una máquina empalmadora y los miembros de la tribu pueden operar la empalmadora y tener una mejor idea de qué es la fibra y cómo puede mejorar sus vidas”, afirmó Deborah.
Neil, por otro lado, está fomentando el desarrollo y la conexión de su comunidad al empoderar a los lugareños con las herramientas, la tecnología y los conocimientos adecuados; pero, especialmente, construyendo puentes con personas de todo el mundo. En los últimos meses, el Centro Rural Urbano ha acogido a personas de Irlanda, México, Nigeria, etc. Neil fue el puente para esta reunión en la Ciudad de México.
Es alentador conocer a personas con tanta pasión por usar el acceso de banda ancha como una puerta para mejorar la vida de las comunidades rurales, permitiéndoles aprender, explorar e interactuar con personas de áreas urbanas y de otros países. Esperamos poder colaborar con ambos y pronto tendremos algunas sorpresas.