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EL COMIENZO DEL FIN (del Cobre en Redes de Acceso Residencial)

by jmem75

Por Gilberto “GG” Guitarte

El año: 1998. El estándar: ANSI-T1.413 Edición 2. El efecto: el comienzo del fin del semi eterno Par De Cobre por parte de las compañías telefónicas.

ANSI-T1.413 Edición 2 marcó el comienzo de la verdadera revolución de acceso residencial a internet sobre red de par de cobre trenzado llamada comercialmente “net surfing” o “web surfing” con velocidades en ese momento muy respetables de hasta 8 Mbps de bajada provistas por DSLAMs (multiplexores de acceso a línea de abonado) en Oficina Central (CO o Central Office). Los escasos 640 Kbps de subida eran más que suficientes para comandar búsquedas de internet por temas específicos y lo que se valoraba era la rapidez de bajada con la gran cantidad de data/información solicitada previamente por el usuario en un comando de muy pocos Bytes y que requerían por tanto muy baja velocidad de subida. Se “surfeaba la red” buscando información con comandos simples—y cortos—en Bytes y bps de subida, esperando por parte de la web esa avalancha de bajada de datos/información de muchos Bytes y de buena velocidad en bps. Surfear la red es un servicio completamente asimétrico—es decir, la velocidad de bajada es mucho mayor a la de subida—muy diferente al servicio simétrico requerido por las aplicaciones actuales para poder trabajar/estudiar desde casa

Luego siguieron mejoras en velocidades de bajada y de subida gracias a la evolución de estándares que proveían mayores anchos de banda en frecuencias más elevadas tanto para las velocidades de bajada como para las de subida; como, por ejemplo el ADSL2 y ADSL2+, y dando lugar a servicios simétricos posibles por las variantes de HDSL, SHDSL, HDSL2 y HDSL4, VDSL y VDSL2, hasta llegar inclusive a G.fast (ITU-T-G.9700 y G.9701).

Tabla

Descripción generada automáticamente

El uso de frecuencias muy elevadas, en el orden de los 35 MHz en VDSL2 y hasta 106 o 212 MHz en G.fast, requerían distancias muy cortas de bucle de abonado (o par trenzado de última milla); por lo tanto, se mudaron los DSLAMs a la planta externa—requiriendo energía eléctrica y aire acondicionado en dichos armarios electrónicos ahora expuestos al medio ambiente. El bucle de cobre debía estar en óptimas condiciones en cuanto a aislación, apantallado, y aterramiento, para mitigar la acción del ruido, o señales no deseadas. La realidad es que más del 90% de las instalaciones de par de cobre trenzado de las telefónicas eran de Cat 3 (hasta 16 MHz) y exigirles transmisiones confiables y sin interferencias por X-TALK (NEXT y FEXT) a frecuencias por arriba de sus posibilidades, era demasiado. Cada vez había que aplicar más medidas electrónicas de mitigación de ruido, como el famoso VECTORING, y disminución de atenuación, como, por ejemplo, acortar aún más las longitudes de bucle de abonado para poder utilizar parte de la red existente de última milla en cobre.

“EL FIN DEL COMIENZO” (de La Fibra en Redes de Acceso Residencial)

Hasta finales de los ’90 las redes residenciales de acceso de fibra óptica (FTTH) eran muy pocas, muy costosas, y Punto a Punto (P2P, o Point To Point). En ellas, los transceptores ópticos de CO (OLT u Optical Line Terminals), la red de planta externa de fibra óptica (ODN o Red de Distribución Óptica), y los transceptores ópticos de abonado (ONTs u Optical Network Terminals), eran elementos dedicados a cada usuario—el costo por usuario las tornaba prohibitivas. Su existencia se debía tan sólo a decisiones estratégicas gubernamentales a nivel país como en el caso de Japón y Corea del Sur. 

Comienzan en ese momento a desarrollarse las redes PON (o Passive Optical Networks), que eran redes de fibra óptica P2MP (Point To Multi Point, o Punto a Multi Punto). En ellas, a partir de un elemento pasivo llamado Divisor Óptico de Potencias (o splitter), tanto los transceptores ópticos de CO como la red primaria hasta dichos splitters, eran totalmente compartidos por 32 o 64 usuarios—reduciendo drásticamente el costo por usuario. De igual modo, al ser la planta externa entre la OLT y la ONT totalmente pasiva (sin necesidad de energía eléctrica) y de vidrio (fibra óptica) los gastos operativos y de mantenimiento ¡se redujeron drásticamente también!

¿Y LAS CABLERAS Y SUS REDES COAXIALES?

Al igual que las telefónicas, las cableras intentaron (y siguen hoy intentando) mantener hasta último momento la última milla de red de acceso residencial con el cable coaxial ya instalado hace muchos años (varias décadas en muchos casos). Así como las telefónicas echaron mano a la tecnología DSL, y su evolución, las cableras echaron mano a la tecnología DOCSIS (Data Over Cable Service Interface Specification), y su evolución, pasando por DOCSIS 1.0, luego 1.1, luego 2.0, luego 3.0, más recientemente 3.1, y, finalmente—en cocción en este momento—DOCSIS 4.0. Si bien el cable coaxial de las cableras es muy superior en ancho de banda al par trenzado de cobre Cat-3 de las telefónicas, requiere igualmente energía eléctrica en planta externa en el nodo de transición de fibra a coaxial. La fibra se extiende desde la Cabecera (o Head End) hasta el nodo. Finalmente, en la última milla de coaxial, se requiere acondicionamiento del cable coaxial apantallado, y mantenimiento considerable para evitar el egreso de la señal transmitida y mitigar el ingreso de ruido electromagnético.

En el lado izquierdo un pedestal de la operadora telefónica, al lado derecho un pedestal de la empresa cablera (Imagen cortesía de Gilberto “GG” Guitarte).
Pedestal de la operadora telefónica (imagen cortesía de Gilberto “GG” Guitarte “).

¿CUÁL FUE MI EXPERIENCIA EN CARNE PROPIA?

Viviendo en Valencia durante tres años, me acostumbré al servicio ADSL de Telefónica de España; así que, al regresar a Carolina del Norte en el 2003, me subscribí al servicio ADSL de AT&T ya disponible en mi barrio. Mis velocidades de bajada y subida eran—con mucha suerte y buena temperatura y humedad ambientales (y la hora del día…nunca olvidemos este factor)—de 800 kbps/100 kbps respectivamente. Ya cansado de lo impredecible del servicio ADSL por la edad de los cables de cobre me pasé en el 2006 al servicio en DOCSIS 2.0 ofrecido por TWC, mi cablera local en ese momento.

Mi casa se transformó en un queso gruyere—atravesada desde afuera hacia adentro por cables coaxiales para llegar a las distintas terminales de TV. El servicio de Internet mejoró ligeramente, aunque la calidad de este dependía más que nunca de la hora del día, ya que la señalprovista por el coaxial de la calle—era ancho de banda compartida con todos los usuarios “colgados” del mismo cable proveniente del mismo nodo… ¡Ufffff!

Duré dos años con TWC y me volví a pasar a AT&T; pero, ahora con un DSLAM remoto ubicado a unos 150 m de mi casa y con un servicio de ADSL2+ que tenía más ancho de banda que el anterior (ADSL) provisto por esa operadora, y un servicio de TV digital respetable. Todos los cables coaxiales desaparecieron de mi hogar; pero, desde el DSLAM remoto hasta la vieja caja terminal de cobre de la vereda—y la NID (o Network Interface Device) de mi casa—seguía predominando eso: “la edad del cable de cobre con aislación deteriorada con apantallado en mal estado, y la edad de la caja terminal, y su muy vieja tecnología de contacto por poste o tornillo”. Ante mis quejas permanentes me promovieron a servicio VDSL2 con dos pares de cobre dedicados a mi hogar; pero, el cable y su edad—así como la caja terminal y su edad—seguían siendo el eslabón débil de la cadena.

TODO FIBRA ÓPTICA HASTA EL HOGAR… ¡Finalmente!

Hace escasos dos años atrás, cansado de que cada dos o tres meses ATT apareciera por casa buscando pares de cobre en buen estado entre el armario de calle y mi caja terminal de cobre y ya a punto de cancelar el servicio con ellos una vez más, me dijeron: “Por el mismo costo mensual de su servicio Triple-Play actual lo podemos ahora migrar a nuestro nuevo servicio FTTH, ¡con fibra hasta su hogar de 100Mbps!” 

Luego de disfrutar de un año sin problemas de dicho servicio, me incrementaron el costo y ante mi protesta me dijeron que como era muy buen cliente desde hacía muchos años, me mantendrían el precio mensual; y, soy ahora UN MUY FELIZ USUARIO de servicio bidireccional simétrico de 1Gbps. ¡Ah! y además… ¡es sobre TODO FIBRA ÓPTICA!

Gilberto “GG” Guitarte es un experimentado líder de fibra óptica, fue presidente del Fiber to the Home Council Latin America (ahora Fiber Broadband Association LATAM Chapter). Actualmente es instructor certificado por la Fiber Optic Association (FOA) y consultor en Redes de Acceso de Fibra y Redes Pasivas Ópticas (Passive Optical LANs).

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1 comment

Pastor Peña agosto 5, 2021 - 5:26 pm

Me gustaría felicitar al Ing. Guitarte por este artículo tan esclarecedor y didáctico sobre la evolución del acceso residencial a Internet.
Es interesante conocer esta historia y comprender los beneficios e inconvenientes de cada etapa hasta llegar a la fibra óptica.

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